El 2022 ha demostrado que las tiendas físicas y la industria del retail son muy relevantes para el comercio electrónico.
El ejemplo más claro es que en el último trimestre las ventas el línea de Amazon disminuyeron 4%, mientras la ventas de sus propias tiendas físicas Amazon Go aumentaron casi 13% en el mismo periodo.
En esta era omnicanal las marcas están luchado por posicionarse dentro del gusto de los compradores.
Con una tradición por las compras en tiendas físicas, la tecnología ha impulsado las compras omnicanales a través de todos los canales existentes.
Ante el cierre de grandes cadenas del retail, el surgimiento de otras y el valor de la marca por encima del canal de origen, los grandes jugadores del ecommerce han demostrado la necesidad de aliarse con el mundo físico.
Un ejemplo de una estrategia basada en esta premisa, son las pop-up stores que Shein, la tienda en línea de ropa china más grande del momento, ha montado en ciudades estratégicas en los últimos años.
A lo largo de Estados Unidos, Canadá, Europa, Australia y otros puntos de venta relevantes como la Ciudad de México, la marca de ropa ha podido consolidar una experiencia inmersiva con sus compradores finales.
Con estas acciones la empresa está testeando el mercado potencial de cada ciudad.
Aunque este no es el primer caso de una marca en línea que llega al mundo físico por la demanda de sus consumidores, Shein se está posicionando como la marca número uno en fast fashion a nivel mundial